Despedida

Hola,

El próximo lunes será mi último día en el trabajo y como me dijeron ayer en la cena de despedida pasaré a formar parte del gran negocio de España, el paro.
La cena fue más o menos bien...supongo que no era muy buen día para celebrarla ya que llevaba toda la semana sin dormir apenas y la mente muy lejos de allí. Hubieron lágrimas como en casi todas las despedidas, y cada vez que recibía un abrazo salían más, a lo que yo contestaba: Joder! pero yo para qué me pinto! Como ya dije en un post de hace tiempo, con la edad voy a peor, cada vez me hacen falta más abrazos y cada vez los aprecio más.
Aparte de los abrazos y las lágrimas hubo alguna que otra conversación más o menos profunda en la que cuando dije que yo era sensiblona me contestaron que no lo parecía, "tú Vane, tienes pinta de tía seria, de saber lo que quieres". Que tenga cara de seria no quiere decir que no tenga mi corazoncito, no????
En fin, el lunes recogeré mis cosas y me iré ya que ayer no me convencieron para que me quede. Me llevaré mi taza, el elefante de la India que Nuria me trajo de su viaje, mis valerianas para cuando contar hasta 10 no me servía para no cabrearme como una mona, la torre eiffel que Renata me trajo de su viaje a París, algún que otro trozo de chocolate que debe quedar en los cajones al lado de algún caramelo perdido, mi cepillo de dientes para cuando me quedaba a comer, las flores de papel que adornaban mi calendario y alguna cosa más que ahora no recuerdo.